«Llegar a Europa es el sueño de todos los jugadores colombianos», dijo el vallecaucano.
El Cagliari, de la Primera división italiana, hizo oficial hoy el fichaje a título definitivo del delantero colombiano Damir Ceter, que llega al club sardo procedente del Independiente de Santa Fe, con un contrato hasta 2022.
«El Cagliari Calcio está feliz de anunciar que adquirió las prestaciones deportivas de Damir Ceter Valencia. El joven delantero, nacido en 1997, llega al club ‘rossoblu’ a título definitivo: para él un contrato hasta 2022», se lee en el comunicado oficial del club.
Ceter, nacido en Buenaventura, en el departamento de Valle del Cauca, se formó en los juveniles del Universitario Popayán y debutó con el primer equipo en el curso 2014-2015, sumando 24 partidos y 7 goles.
Tras lucirse en 2016 con 14 goles en 25 partidos disputados con la camiseta del Deportes Quindío, el colombiano se marchó al Independiente Santa Fe, con el que también llegó a debutar y marcar en la Copa Libertadores.
El futbolista de Buenaventura formó parte además de la selección Sub-20 colombiana que participó en los campeonatos suramericanos del año pasado, y logró anotar dos goles en dos encuentros disputados.
En la rueda de prensa de presentación, Ceter aseguró que «llegar a Europa es el sueño de todos los jugadores colombianos», e informó de que su técnico en el Independiente de Santa Fe, el uruguayo Gregorio Pérez, le aconsejó fichar por el Cagliari.
«No he hablado con ningún jugador colombiano que juega en Italia, sólo hablé con Gregorio Pérez, mi entrenador en el Independiente que estuvo en el Cagliari hace 20 años. Me habló muy bien tanto del equipo como de la ciudad. Este ambiente es ideal para crecer», dijo.
Además, explicó que se inspira en su compatriota Radamel Falcao, al que definió como un «héroe nacional», aunque se identificó futbolísticamente más con el también colombiano Luis Muriel, actual delantero del Sevilla.
El Cagliari subrayó en el comunicado que Ceter contará con la posibilidad de «crecer y demostrar toda su calidad» en Cerdeña, además de recibirle con un «Bienvenido y mucha suerte, Damir!».
EFE